Número actual
Abril-Junio 2025 vol. 76-2
Portada
Indice
Desde el Comité Editorial
Presentación Los logros de la inteligencia artificial en México
Un viaje fantástico: el papel de la visión computacional para el diagnóstico médico
Neurorrobótica
Robots de asistencia social para personas con demencia
Detección inteligente de caídas para el cuidado de los adultos mayores
Ambientes inteligentes para apoyar el aprendizaje
Técnicas de inteligencia artificial para la operación de robots de servicio
Monitoreo de fenómenos sociales y ambientales mediante observaciones de la superficie terrestre
Control inteligente de robots mediante gestos de la mano
Juegos para el desarrollo del pensamiento computacional
El cómputo afectivo como experiencia artística
Problemas y riesgos de la inteligencia artificial, y legislación para atenderlos
Deepfakes, educación, optimización, música y diseño: la IA y los procesos computacionales en la investigación en la UAM
Colesterol en el cerebro: ¿bueno o malo?
Afectaciones en el embarazo por el estrés durante la pandemia del covid-19
Camarón y agave, un coctel de salud a la vista
Síntesis de péptidos a través de maquinarias no convencionales
ADN extracelular, ¿benéfico o dañino para la supervivencia de las plantas?
Colores, tamaños y formas: la diversidad de los reptiles de México
Cannabis: el tránsito de una planta utilitaria a una mágica
Desde las redes
Noticias de la Academia Mexicana de Ciencias
Artículos fuera de los volúmenes Publicados online
Con el fin de conmemorar al creador y director del Instituto Nacional de Psiquiatría Dr. Ramón de la Fuente Muñiz, se instaura en el año 2008 la Cátedra que lleva su nombre. Es una distinción que se otorga a académicos que, con su trabajo, han hecho crecer a dicha institución y han realizado aportaciones fundamentales al mejoramiento de la salud mental en nuestro país, inclusive con repercusión mundial. La primera Cátedra Ramón de la Fuente estuvo a cargo del profesor Timothy Crow y se tituló “El punto de ruptura cerebral y el origen de la psicosis”; en 2009 correspondió al profesor Alfonso Escobar-Izquierdo, con la ponencia “Perspectivas en la fisiopatología de la psicosis”. En 2010 la Cátedra recayó en el doctor David Kershenobich; en 2011 fue sustentada por el doctor Héctor Pérez-Rincón con la ponencia “Defensa e ilustración de la psiquiatría”.