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■■ ■  Astrobiología

Cuadro 1. Antecedentes históricos o de trasfondo que forjaron la idea de la astrobiología de los exo-oceános

1979                 John B. Corliss y cols. confirman la circulación convectiva de agua marina en las crestas oceánicas:
                     las ventilas hidrotermales, un ecosistema reconocido por geofísicos marinos del Instituto Scripps
1979                 de Oceanografía en California, en 1973.
                     Imágenes obtenidas durante los sobrevuelos de las naves espaciales Voyager 1 y 2 sobre el sistema
1977                 joviano descubren que la superficie helada de Europa está accidentada, lo que sugiere que el interior
1975                 podría estar térmicamente activo.
1974-1975            Carl Woese reestructura la clasificación de los seres vivos en tres dominios, estableciendo el uso
1974                 del gen ribosomal 16S rRNA como fuente informativa para comparar a todos los seres vivos.
                     El físico planetario Guy J. Consolmagno publica una tesis enfocada en la energía térmica de los satélites
                     de hielo que propone un océano en estado líquido al interior de Europa.
                     Gordon de Quetteville Robin y cols. reconocen por ecosondeo lagos subglaciales en la Antártida,
                     sugeridos desde 1968, entre los que destaca el Lago Vostok como el mayor y más profundo de todos.
                     Robert D. MacElroy propone el término extremófilo, que significa “amantes de lo extremo”, y utiliza
                     como organismos de referencia a los termófilos y halófilos, los cuales crecen preferentemente
                     en condiciones de temperatura y salinidad altas.

postre se convertiría en la astrobiología del sistema      habitabilidad. Cabe mencionar que los autores dan
solar exterior. En el cuadro 1 se presenta un recuen-      crédito a Hoagland en sus referencias, además de a
to de los hitos más importantes que incentivaron la        Arthur C. Clark.
astrobiología de los satélites de hielo.
                                                             Los exo-océanos
   Sin duda, la ciencia se sirve de la imaginación y         ¿Cómo permanece líquida el agua para formar
viceversa. Un claro ejemplo de esto es Europa, uno         océanos? El calor que funde el hielo proviene de
de los satélites de Júpiter. En 1980 el autor Richard      un proceso conocido como mareas gravitacionales.
G. Hoagland publica una nota titulada “The Europa          Algunos de los satélites del sistema solar exterior
enigma” y propone que podría haber vida en un océa-        retuvieron agua desde su agregación original y ésta
no con ambientes hidrotermales de dicho satélite.          permanecería en estado sólido de no ser por las de-
Hoagland llamó la atención hacia Europa de Arthur          formaciones periódicas causadas por la atracción ha-
C. Clark, quien situaría ahí sucesos significativos de     cia su planeta. Las mareas provocan una fricción del
su novela 2010: El año que hicimos contacto. Sin em-       material interior que se disipa en forma de calor y
bargo, abrirse a la creatividad tiene límites y un costo,  puede incluso fundir el hielo. Y no sólo los gigantes
como resulta evidente en los escritos de Hoagland,         gaseosos exteriores contribuyen al calentamiento por
autor prolífico para lectores ávidos de teorías, que la    mareas, algunos satélites cercanos son masivos tam-
comunidad científica califica como pseudociencia.          bién (por ejemplo, Titán y Ganímedes), de manera
                                                           que, aunque el campo gravitacional podría estabili-
   Una propuesta con sustento cuantitativo sobre la        zarse adquiriendo una órbita circular (es decir, con
habitabilidad de Europa fue la de Reynolds y cols.,        una excentricidad de cero) y disminuir el efecto de
publicada en 1983. En ésta encontramos la prime-           marea, la atracción gravitacional ejercida por otros
ra formulación de lo que actualmente se conoce en          satélites determina órbitas excéntricas o elípticas. En
astrobiología como “Follow the water” (“seguir el          satélites como Europa en el sistema joviano, o Encé-
agua”), la cual propone como directriz que el hallaz-      lado, una luna de Saturno, el efecto del campo gravi-
go de agua líquida en un objeto celeste es un primer       tacional ejercido por los satélites masivos determina
filtro para que un sitio sea considerado habitable.        que ocurra entre ellos resonancia orbital, es decir, sus
Este artículo significó también que en la astrobio-        periodos de traslación guardan una proporción geo-
logía, otrora exobiología, se contaba con concep-          métrica o en armónicos; por ejemplo, los satélites
tos, métodos y tecnologías suficientes para resolver
hipótesis más lejanas, incluyendo el uso de uno de
los términos más comunes de la jerga astrobiológica:

36  ciencia ♦ volumen 75 número 2 ♦ abril-junio de 2024
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